Primer día y primera visita en Jordania. Vamos al Mar Muerto a 25 km de Amman.
El Mar Muerto , es un gran lago salado situado entre Israel, Palestina y Jordania, es considerado el lugar habitado más bajo del planeta, pues está a casi 400 metros debajo del nivel del mar. La presión atmosférica es la más elevada del planeta y en el lugar hay una tasa de oxígeno 15% superior a la que existe al nivel del mar.
Tiene 76 kilómetros de largo y un ancho máximo de 16 kilómetros. Su superficie aproximada es de 1049 kilómetros cuadrados.
El nivel del agua esta descendiendo a una velocidad de 1 metro por año. El problema principal está en la cuenca del Río Jordán (el principal afluente del Mar Muerto), porque Siria, Israel y Jordania usan tanta agua que ya casi nada corre por su cauce
El Mar Muerto , en la parte Jordana, forma parte de una zona de seguridad. No hay viviendas particulares, solo hoteles, y las playas no son publicas, sino privadas.
Amman Beach es una de ellas. El acceso a ella es bastante caro para la economía de un Jordano. 15 Dinares.
El complejo consta de tienda, vestuarios, bar , restaurante y unas magnificas piscinas.
Aparte de nosotros hay muy poca gente en la playa.
Nos ponemos el bañador , y al agua, a tomar el sol.
La alta densidad del agua conseguida por su alto contenido en sal y por la concentración de magnesio, hace que se pueda flotar sin dificultad.
No es recomendable sumergirse, ni tirarse de cabeza ya que correríamos peligro de ahogamiento, y no se ve por aquí ningún puesto con socorristas. Si tienes heridas abstente también de meterte, la sal hace que escueza, y mucho.
A cambio de 3 dinares, la gente se puede embadurnar con barros terapéuticos del Mar Muerto.
Al fondo se puede ver Israel, las montañas de Jerusalén y Jericó. Solo hay 16 km en la parte mas ancha.
Y por lo demás, como en una playa mas. Sol, agua, tumbonas, palmeras y duchas.
Ruta hacia el desierto. Salimos de Amman y siguiendo la carretera R40, dirección Irak y Arabia Saudita, vamos a visitar el caravasar de Qasr al-Kharraneh, el Palacio Omeya de Qusair Amra y el El castillo de Qasr Al Azraq.
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La primera de las paradas es en el caravasar de Qasr al-Kharraneh, a unos 60 km al sur de Amman
Es uno de los primeros castillos construidos por los omeyas en esta región, y aun así se encuentra muy bien conservado
25 km más adelante llegamos al palacio Omeya de Qusair Amra .
Es una pequeña joya del arte Omeya. El castillo fue utilizado como lugar de veraneo por el califa o por sus príncipes, para el deporte y el placer.
Sorprende su sistema de recogida de aguas. Disponían de una gran noria (hoy en día reconstruida),que seguramente era accionada mediante tracción animal, que no solo recogía el agua del pozo, sino que también lo llevaba a los baños mediante canalizaciones de barro cocido .
Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, descubre sus paredes y techos interiores cubiertos por animados frescos que representan imágenes de caza, mujeres bañándose, signos del Zodiaco. Estas imágenes de mujeres desnudas no son muy comunes en las construcciones islámicas.
El último castillo que visitamos es el de Qasr Al Azraq, a 100 km de Amman, y ya muy cerca de la frontera con Arabia Saudita.
Qasr Al Azraqque ,en árabe significa Castillo Azul ,es una enorme fortaleza localizada cerca del Oasis de Azraq en pleno desierto jordano
El castillo es una estructura cuadrada de 80 metros de largo, amurallada y con un gran patio centra. Lawrence de Arabia hizo de la fortaleza su cuartel general durante la campaña militar del invierno de 1917.
La entrada principal consta de una enorme bisagra de un bloque de granito de nos 300 kg,
Su valor estratégico se debe a un cercano oasis, la única fuente de agua en esta desértica región.
Visita muy rápida ya que llegamos justo en el momento de cerrar.
Y ya a la vuelta, camino hacia Amman, paramos en Qusair Amra,y en la Jaima de un Beduino, tomamos un té y pasamos un rato oyendo música ,e incluso ,algunos bailando.